La maternidad y paternidad son etapas intensas que pueden generar desgaste físico y emocional. Aunque la prioridad suele ser el bienestar del bebé, el autocuidado es indispensable para sostener una crianza sana.
¿Por qué es importante cuidarte?
- Reduce el riesgo de agotamiento, ansiedad o depresión posparto.
- Mejora tu capacidad de respuesta ante los desafíos del día a día.
- Refuerza el vínculo con tu pareja, familia y entorno.
- Enseña con el ejemplo que el cuidado también es para uno mismo.
Estrategias simples de autocuidado:
- Descansa cuando puedas: no todo debe estar perfecto. Dormir lo más posible es vital.
- Acepta ayuda: delegar tareas no es rendirse, es construir red.
- Aliméntate bien y mantente hidratado(a).
- Habla de lo que sientes: la comunicación emocional alivia tensiones.
- Reserva pequeños momentos para ti: leer, caminar, meditar, o simplemente estar en silencio.